Habiendo pasado dos días con mi esposa
en Itacimirim (30 km al norte de Salvador de Bahía y 5 km antes de Praia do
Forte), fuimos hacia nuestro destino final, MASSARANDUPIÓ, ubicada a 80 km
de Bahía.
Tomamos un remise y fuimos hacia el
norte por autopista, luego por tierra 5 km hasta el particular pueblito de
Massarandupió y nuestra posada elegida, RIO e MAR.
Al entrar a la posada nos recibió
Lurdes (la dueña) que habla un portuñol muy entendible, así como ella
entiende el nuestro.
Su esposo Edilson, nos mostró la
posada, que es de un estilo típico brasilero, de dos plantas, amplio
estacionamiento, destacándose la prolijidad y limpieza en todos los lugares
y el área naturista en el que se encuentra la pileta, un quincho y sus aves
de granja.
Después de acomodarnos, Edilson se
ofreció a llevarnos hasta la playa, a lo cual accedimos. Cruzamos el pueblo
a lo largo mientras nos recomendaba e indicaba los lugares para cenar. Este
encantador y tranquilo lugar, que parece naturalmente diseñado para
descansar y pasar días en paz, no es para quienes busquen trasnochar, ir al
casino o a la disco.
La playa se encuentra a 2 km del
pueblo, separados por una reserva natural en la que, a medida que uno se
acerca, va aumentando notablemente la cantidad de palmeras (coqueiros).
Esta playa tiene varias
particularidades: primero hay una hilera enorme de médanos con arena
absolutamente blanca (que no se calienta!!!), luego un pequeño río donde se
puede optar por cruzar un puente con el vehículo y desembocar en la playa o
dejarlo en el estacionamiento bajo las palmeras (cuidado caen cocos) que es
lo que hacen todos.
Nosotros vadeamos a pie el río de agua
transparente y tibia con pequeños peces. (No asustarse ! el nivel es hasta
las rodillas ) para pasar entre médanos más pequeños de arena amarilla, y
llegamos a una barraca (bar de playa).
Edilson nos indicó que vayamos hacia
la derecha e inmediatamente vimos una pareja desnuda, a lo que nuestro guía
nos dijo que esta no era área para estar “pelados” (desnudos) aunque igual
lo tomó con naturalidad.
Caminamos unos 200 m donde vimos un
cartel que dice “Praia Naturista de Nudez Total” o sea nudismo
obligatorio (algo que no se puede hacer en Argentina ya que las playas
públicas autorizadas para el nudismo son legalmente de vestimenta optativa).
Allí nos encontramos con dos Barracas
pequeñas donde los únicos autorizados a estar con malla son los mozos, muy
amable ellos.
Es una playa realmente gigante, donde
uno puede caminar desnudo hasta quedar tan solo que desea volverse.
Una particularidad de este lugar es
que cuando se levanta viento la gente pasa detrás del médano y utiliza el
río (también área naturista) donde no hay viento.
Edilson nos dijo que para volver
podíamos hacer “carona” (autostop o dedo) y que seguro
nos llevarían Y así fue, nos recogió un matrimonio de Río de Janeiro que se
hospedaba también en Rio e Mar.
Nuevamente en la posada decidimos
visitar el área naturista con su pileta, donde junto con la pareja carioca.
Disfrutamos de un lindo atardecer. Y mientras hablábamos, Edilson nos
convidó con cocos “con pajita” que cortó de su propia palmera.
Al día siguiente nos sirvieron el
desayuno… Este merece un capítulo aparte, no porque sea muy diferente al de
otras posadas u hoteles en sus componentes sino porque la gran variedad de
tortas son hechas por la propia Lurdes con huevos de sus gallinas. Y tanto
los jugos como licuados (deliciosos) son de frutas de sus propios árboles
típicos de la zona y desconocidos para nosotros.
En resumen, hemos pasado hermosos días
en un pueblito del pasado, en una posada maravillosa Rio e Mar de
Massarandupió que les recomiendo.
La Pousada Rio e Mar está ubicada en el poblado de Massarandupió,
perteneciente al Municipio de Entre Ríos- Bahía de San Salvador, Brasil,
siendo atendida por sus dueños Las Suites están equipadas con TV, frigobar,
aire acondicionado o ventiladores, Wi Fi y estacionamiento incluido. Cuenta
con parrilla, servicio de bar y desayuno también incluido. El área de la
pileta es de nudismo obligatorio
Los socios de APANNA, con cuota anual al día, tienen un 10% de
descuento.
En el pueblo se puede encontrar una amplia variedad de frutas y otros
productos típicos de la región. Todo el entorno y la reserva natural esta
conservada con el control del IBAMA y CRA, que, entre otras cosas, ha
desarrollado junto con el Proyecto TAMAR, un excelente trabajo de
preservación de las tortugas marinas.
La artesanía local ofrece bolsos, sombreros, esteras de paja y fibra de
palma, entre otros. Los que se producen en los balcones de las casas y en
presencia de los turistas.
El acceso a Massarandupió se hace desde Salvador tomando la autopista BA-099-
Al llegar al complejo hotelero de Costa do Sauipe, en el km 88, tomar a la
derecha. Desde allí hasta la posada son 4 km en un camino de tierra.
Esta playa tiene una extensión de aproximadamente 2 km con turistas
provenientes de todas partes del mundo.- El área naturista es reservada y se
aplica el Código de Ética Naturista de la Federación Brasilera de Naturismo.
Posee servicio de bar y restaurante.