Desnudo en el espectáculo
Amour, acide et noix

La pieza Amour, acide et noix
habla del peso de la soledad y del irresistible deseo por el otro. Cuatro
bailarines desnudos exponen una pureza rotunda, absoluta. La piel constituye
el verdadero vestuario de la obra, detrás de ella se encuentran los
músculos, el agua, la respiración, los deseos y los miedos. De hecho, la
desnudez manifestada oculta una fragilidad y una infinita ternura,
incidiendo en la dureza de la vida.
Desde su creación en 2001 Amour,
acide et noix ha realizado numerosas giras por todo el mundo. Se pudo
ver en Europa en la Bienal de Venecia y el público, profundamente conmovido
por su dureza y honestidad, se entregó absolutamente. La obra tiene el
premio Dora Mavor Moore de 2004 y el Premio del Público de Zagreb de 2005.
Daniel Léveillé es un conocido
coreógrafo que ocupa una posición singular en la danza canadiense. Durante
los últimos 25 años ha creado una veintena de obras que han sido
interpretadas por bailarines extraordinarios y ha contribuido así a la
evolución de la danza. En 1982 el Consejo de las Artes de Canadá le concedió
el Premio Jacqueline-Lemieux como reconocimiento por la calidad de su
enfoque artístico. En 1991 fundó Daniel Léveillé
Danse.
Entre sus numerosas creaciones
coreográficas destacan Le Sacre du printemps (1982), Les Traces
no I, II, III, IV, V, VI (1989), L’Exil ou la Mort (1991), Jules
et Juliette (1994), Utopie (1998), La pudeur des icebergs (2004)
y Crépuscule des océans (2007).
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