Así divagaba el poeta Epicurius en la Plaza Central de Nudelot
ante sus fieles seguidores
"Conocer y vivir el nudismo genera un placer surrealista inimaginado,
es como sumergirse dentro de una obra de Van Gogh.
Es una experiencia única vivencial como el nadar completamente desnudos
u otros planes soñados como recorrer bosques o sitios naturales.
Inclusive para quienes viven apresados dentro de jaulas de oro, es una
oportunidad para experimentar la libertad.
Somos una tribu extraña e indómita, capaces de legar un torrente
hipnótico de experiencias. Todos somos mucho más parecidos de lo que
imaginamos y por eso, nos identificamos al leer algo que pudo ser
privado, pero que todos deseamos, anhelamos o hemos experimentado, en
algún momento en nuestras vidas.
Nuestros ritos no son más que experiencias vivenciales, exploraciones
sensoriales. No somos un aquelarre, pero debemos ir a los bosques,
sentir el musgo frío y húmedo en los pies, abrazarnos a los troncos de
los árboles, sentir su energía, escuchar al viento y los susurros de los
silencios.
La historia fantástica de Nudelot debe ser más que un libro o película
de ciencia ficción. Nosotros podemos generar un gran vivero y una
siembra industrial de árboles, para asegurar la magia del libro impreso
en el futuro.
¿Qué es lo que hace tan especial, a la historia fantástica de Nudelot?
¿Por qué es y debe ser tan especial ese lugar?
¿Puede ser la fantástica historia de los monjes y las monjas, de sus
longevas historias y aventuras, experimentando para aportar felicidad a
la miseria humana?
¿Será el ambiente misterioso de los monasterios y castillos, sus
rituales, las lloviznas de los veranos, las tradicionales fiestas de la
liberación en donde se le arrebataba la máscara perversa de lo que era
censurado o tildado de pecaminoso?
¿Será la magia de los colores de las flores que van desde el blanco más
puro hasta el purpura más vivo, sensual y erótico.
Hay algo más mágico que caminar sobre el césped húmedo, jugar hasta el
éxtasis y caer para observar el cielo, las nubes… Gracias a este mar de
sensaciones fuimos depurando estándares para la vida, fuimos forjando
leyendas, para perpetuar la esencia de la felicidad.”
Héctor Cediel Guzmán
Bogotá, D.C. Colombia
hectorcediel@gmail.com
Continuara >>>
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